En este artículo te damos unos consejos para que puedas ahorrar con tu actual frigorífico.
- Adecuar el frigorífico y congelador a las necesidades reales del grupo familiar y a su modo de vida
- Procurar que ventile por la parte trasera
- Limpiar periódicamente el serpentín de la parte posterior para que se pueda disipar el calor que se desprende de él cuando actúa el compresor
- No colocarlo cerca de fuentes de calor (horno, cocina, etc.), dado que puede suponer un 15% de incremento de consumo eléctrico
- Descongelarlo antes de que se forme una capa de hielo de 3 mm. El hielo es aislante (recordar los Igloos) y dificulta el enfriamiento interior del aparato
- La temperatura ideal para el frigorífico debe ser entre 5 a 6ºC y la del congelador de -15 a -16ºC
- Comprobar periódicamente las gomas de las puertas para que mantengan bien cerradas las puertas
- Cuando lo desenchufamos durante algún tiempo mejor sacar las cubetas de plástico para evitar la formación de moho
Como resulta un poco liosa la definición de la clase energética, podríamos decir que se trata de un indicador de lo eficiente que es un electrodoméstico en comparación con el resto de los de similares características.
Así por ejemplo un electrodoméstico de clase A consume un 55% de la energía que consume un electrodoméstico medio del mismo tipo, mientras que un electrodoméstico de clase G consume un 25% más que la media (que sería de un 100%).